Érase que una vez…

Érase que una vez nació una niña por amor,

Ya mujer, hoy quiero dar las gracias; papá y mamá,

Porque me disteis el ser, vida en mi piel

Por las noches de desvelo, por las horas de consuelo,

Por hacer de mi una reina; gracias.

Hoy quiero daros mi amor, os debo lo que yo soy;

Esfuerzo y fortaleza yo aquí aprendí de vosotros dos.

En donde esté, en mi alma estaréis pues mi corazón vuestro es.

Érase que una vez vivió una niña muy feliz,

Pues creció en un hogar repleto de amor y paz.

Tan sólo puedo decir: mil gracias.